Después de un descanso obligado regreso al ataque… Los libros son esenciales para la sociedad. Son una puerta abierta al conocimiento y una herramienta fundamental de los educadores. No solo sirven para educar, aprender y conocer, sino también para entretener, crear y soñar.
Con la llegada de nuevas tecnologías y en especial con la aparición de gadgets para la lectura como el IPad, Kindle, -E-reader y otros, se presenta a todas luces una interrogante: ¿los e-books o libros electrónicos desplazarán a los libros físicos?
La respuesta es clara y concisa: por supuesto que no, por lo menos no en el corto plazo. A lo largo de la historia siempre ha existido la inquietud de que un nuevo producto o servicio aniquilará a otro existente por su similitud o parecido. Por ejemplo, cuando llegó el cine se consideró inminente la desaparición del teatro y no ocurrió; cuando llegó la televisión a nuestros hogares, se afirmó que la radio moriría, y desde luego que eso nunca sucedió. Cuando llegaron los reproductores de cintas VHS y Betamax se pronosticó el fin de los cines, pero tampoco ocurrió.
Cada nuevo producto se ha adaptado a coexistir con el previo y ahora conviven sin conflicto. Por supuesto, hoy en día hay muchos que prefieren ver películas en casa y no quieren ir al cine, pero también son muchos otros los que optan por ir a ver una buena película a una sala cinematográfica. De tal forma que el usuario puede escoger lo que mejor le agrade.
El arribo de los e-books abre la posibilidad de elegir entre un libro físico y uno digital y cada uno de nosotros tiene la libertad de seleccionar la opción que le atraiga. En lo personal me causa un verdadero placer sentir, palpar y hojear un libro real, coleccionarlo, leerlo las veces que quiera sin preocuparme en el consumo de las pilas o de conectarlo para seguir la lectura, para otros, los largos periodos de contemplación en las pantalla es una actividad que cansa y molesta a la vista.
Pero por otro lado, también es necesario señalar que nuestro estilo de vida, ya habituado a la utilización de equipo de cómputo, celulares, cámaras y otros dispositivos digitales, facilitará en gran medida la aceptación de los libros electrónicos en nuestra vida diaria. Sin darnos cuenta, ya estamos involucrados en la cultura digital.
De hecho, desde un tiempo atrás, las editoriales de libros y revistas incitan a utilizar computadoras y dispositivos electrónicos. Ahora venden sus productos con un agregado que puede ser un CD o una referencia o inscripción a un sitio web. Además, muchas de las revistas actuales tienen ya su versión digital, de forma que resulta lógica, como siguiente paso, la utilización de e-books. Entonces, lo más seguro es que pronto veremos nuestras revistas preferidas en un dispositivo de lectura electrónico.
El consumo de libros y revistas digitales dependerá del gusto y comodidad de cada uno de nosotros, pero en primera instancia, la variedad, calidad y diversidad de contenidos que se desarrollen para estas plataformas decidirán su éxito o su fracaso.
Saludos a todos
Luis Sánchez
Lo que algunos piensan que piensan